En la actualidad, tras la sensibilización de la sociedad hacia el medio ambiente. Cada vez son más las personas que al momento de hacer actividades cotidianas tales como comer o realizar su cuidado personal, optan por adquirir productos que generen el menor daño posible al medio ambiente, ya sea durante el proceso de producción , uso o degradación.
Para que un producto sea considerado como “verde” debe de poseer las siguiente cualidades: Ser socialmente responsable, ecológico (reciclable) y debe de hacer uso racional de los recursos como la energía y agua en su proceso de fabricación.
Ante ello diversos negocios o emprendimientos han lanzado productos que aporten positivamente a la sociedad y el medio ambiente, el cual genera en muchas personas la opción de compra decisiva al momento de comprar, según lo explicó Luis Miguel Prado , director de la iniciativa verde Economiaverde.pe en nuestro país.
Entonces, ¿por qué preferir productos verdes peruanos? Aquí te dejamos algunas razones.
Apoyas a un emprendedor local: al comprar un producto o servicio “verde” estás contribuyendo con resolver problemas sociales y ambientales, y al mismo tiempo apoyas a una empresa local que genera puestos de trabajo en nuestro país. Además, se disminuye la huella de carbono que resulta de transportarlo desde otros países.
Cumples con las leyes actuales: Por ejemplo, recientemente se ha promulgado una ley para regular el uso del plástico, con el objetivo de reducir el impacto y la acumulación del plástico en nuestro ambiente antes del 2021. Con ello, establecimientos como cafeterías o restaurantes ya deberían identificar proveedores de sustitutos de plástico para cumplir con la norma y evitar sanciones o multas.
Eres parte de un movimiento global: en todo el mundo se vienen desarrollando comunidades de consumidores responsables y mercados de productos verdes. En Perú podemos encontrar diversas empresas que ofrecen productos y servicios con impacto positivo, que van desde prendas de vestir hasta artículos para el hogar.
Generas un impacto social y ambiental positivo: tus decisiones de compra te permiten aportar al bienestar común… antes de que sea tarde.
Estás creando la economía del futuro: comprando productos verdes también generas un “efecto arrastre”, colaborando para que el mercado de productos y servicios verdes crezca. Esto atraerá más consumidores responsables, y a su vez animará a nuevos emprendedores a brindar servicios de impacto.